domingo, 17 de agosto de 2014

AÑOS SETENTA

Aunque la música electrónica comenzó dentro del ámbito de la música académica (mal llamada «música clásica»), en pocos años fue adoptada en la cultura popular. En el Taller Radiofónico (unidad de efectos especiales de sonido de la BBC), Ron Grainer y Delia Derbyshire crearon en 1963 una de las primeras melodías electrónicas: el tema musical de la serie de televisión Doctor Who (1963-1989). A fines de los años cincuenta, el trombonista Paul Tannen y el inventor amateur Bob Whitsell habían producido el electroteremín, un instrumento que imitaba el timbre del teremín (instrumento extraordinariamente difícil de tocar, ya que no utilizaba un teclado para generar los tonos) pero con un mecanismo de control más sencillo de usar. Tanner tocó su instrumento en varias bandas de sonido para cine y televisión, y en un LP llamado Music from Outer Space (música del espacio exterior). También tocó tres temas en el disco Good Vibrations de The Beach Boys (1966). La compositora y clavecinista Wendy Carlos (en esa época llamada Walter Carlos) popularizó el uso del sintetizador con dos notables álbumes: Bach enchufado (1968) y El sintetizador bien temperado (1969), que tomaba piezas reconocidas de la música barroca y las reproducía con el recién inventado sintetizador Moog. El Moog era monofónico (o sea que generaba sólo una nota a la vez: no podía producir acordes) por lo que para producir obras polifónicas tal como las que grabó Carlos, se requirieron muchísimas horas de grabación en estudio. Se conoce la anécdota de que los amateurs que oían el disco, creían que el sintetizador Moog permitía grabar una línea melódica con un timbre y luego grabar otra melodía con otro timbre, adicionándola a los timbres anteriores (un principio que luego utilizaría el secuenciador).

No hay comentarios:

Publicar un comentario